La muerte espera tras la picadura... ¿o no?

Se tiene la falsa creencia de que tanto las abejas como las avispas acaban muriendo tras clavar el aguijón. Esto no es del todo cierto, ya que sólo un tipo de abejas son las que mueren, y ninguna avispa lo hace.

Los únicos individuos que encuentran la muerte tras clavar el aguijón son las hembras de la abeja melífera o abeja de la miel (Apis mellífera). Se debe a que parte del aguijón está asociado a su aparato digestivo, en concreto al intestino; de manera que cuando clavan el aguijón se les desprende un fragmento de aquél, lo que les provoca la muerte.

Precisamente porque clavar el aguijón es letal para ellas, se lo piensan muy bien a la hora de hacerlo, por lo que no debes tener miedo cuando se acerque una abeja, ya que si haces aspavientos puede sentirse amenazada y es entonces cuando realmente existe la posibilidad de una picadura.

Fotografía: hembra de Apis mellífera en pleno vuelo. Autor:  Raúl Ponce Cardoso

Esta especie de abeja es muy solidaria con los demás miembros de su colonia, hasta tal punto que son capaces de dar su vida con tal de asegurar la supervivencia de sus "hermanos". De hecho, cuando pican, segregan unas feromonas (hormonas volátiles) que avisan al resto de la colonia del peligro.

En otros posts te contaremos más curiosidades sobre las abejas de la miel.

Por Raúl Ponce Cardoso